El buceo aquí es extremadamente diverso: la abundante vida marina aquí hace que sea un desafío encontrar un centímetro cuadrado de lecho rocoso desnudo.
Se ha dicho que fotógrafos submarinos y biólogos marinos lo han aclamado como uno de los mejores de las Islas Británicas.
No tendrá problemas para detectar congrios, lábridos, incluidos cuco, ballan y corcho escondidos en rincones y recovecos. Por la noche, el sitio de buceo cobra vida con langostas que se alimentan a lo largo del lecho marino y, si tiene suerte, verá varios pequeños pulpos de color naranja brillante.